Por José Ureña
García Luna y manifestación en la agenda de Palacio
Dos temas centrarán la agenda de la semana.
En Palacio Nacional, todos lo sabemos, dan seguimiento puntual al juicio a Genaro García Luna, secretario de Seguridad Pública de 2006 a 2012.
Si es declarado culpable, como sueñan los altos funcionarios del Gobierno federal, será la ocasión para descargar toda la furia contra el expresidente usurpador Felipe Calderón.
Puede pasar de señalado a indiciado por encubrimiento u otros delitos -ya se verá cuáles se le encuadran- en los supuestos nexos con el crimen organizado.
-Yo estoy tranquilo -me dijo hace poco el exmandatario en el restaurante Las Mañanitas de Cuernavaca-, no he cometido ningún delito por acción u omisión.
Debe ser cierto, porque nada se ha hecho contra algún expresidente.
Se destinaron cientos de millones de pesos -unos 528, según los cálculos del INE de Lorenzo Córdova- para dar gusto a los afanes de venganza personal.
Pese a ese gasto y la intensa promoción oficialista la convocatoria no prendió porque participaron únicamente seis millones 658 mil 288 ciudadanos, apenas 7.10% de la lista nominal.
Gobierno y Morena culparon al Instituto de este fracaso.
Año y medio después no ha tenido ninguna consecuencia, pues siguen libres y sin procesos abiertos Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña.
Pero el odio a Calderón persiste.
AQUEL ENOJO
El otro tema es la concentración del próximo domingo.
Marcada de antemano como organizada para defender la corrupción y cambiar el slogan el INE no se toca por el de García Luna no se toca, causa inquietud en el poder.
Recordemos la marcha del domingo 13 de noviembre, cuando se dieron cita cientos de miles de ciudadanos para exigir un alto a la reforma ideada para debilitar a los órganos electorales.
Fueron 12 mil, minimizó el secretario de Gobierno de la capital, Martí Batres, pero el escozor en Palacio Nacional fue mayúsculo y por eso utilizó toda la fuerza del poder dos semanas después.
Hubo otro efecto:
Se vio cómo las corcholatas no andan libres y se retrasó el calendario de encuestas y demás simulaciones para postular al designado oficial para la Presidencia.
Esta vez no será la excepción y pronto veremos los cambios en el ánimo presidencial y en la estrategia para encaminar un proceso para, como dijo ayer López Obrador, borrar los sueños opositores en 2024.
La maquinaria del Estado en marcha.
TRAS LA CDMX
El panismo ya resiente la embestida contra su principal enclave, Benito Juárez.
Es uno de los objetivos mayores para las elecciones del año próximo porque, derrotado el PAN en esa alcaldía, se facilitará la recuperación de la Ciudad de México.
La maquinaria que mueve esta persecución ha sido bautizada como Cártel Inmobiliario, por cuya supuesta participación han sido detenidos varios ex funcionarios.
Ahora se busca al exalcalde Christian von Roehrich, quien ha desaparecido y dejó acéfala la coordinación de la bancada azul en el Congreso local.
En su lugar fue designado Federico Döring.
Von Roehrich seguirá prófugo porque la detención de su hermana Sofía von Roehrich y las advertencias al alcalde Santiago Taboada anuncian acciones legales y penales mayores.
