Resalta Jakqueline Ordóñez la mediación como herramienta para generar una Cultura de Paz



M. Hernández

Durante su conferencia en la Universidad Metropolitana de Tlaxcala como parte del III Congreso Internacional “Conciencia Contra la Violencia”, la presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), Jakqueline Ordoñez Brasdefer, aseguró que la mediación ha emergido como una herramienta poderosa en la resolución de conflictos.

Especialmente en contextos de violencia, además de que constituye una oportunidad para generar entre las personas jóvenes una cultura de paz que se vea fortalecida en su edad adulta.

En su conferencia “Mediación como Herramienta Transformadora en Escenarios de Violencia”, ante estudiantes de la Universidad Metropolitana de Tlaxcala, Ordoñez Brasdefer manifestó que la mediación es una figura que comenzó a utilizarse desde mediados del siglo XX en el vecino país de Estados Unidos.

Cuya aplicación ha arrojado buenos resultados para atender disputas educativas, laborales, de derechos humanos, vecinales, entre otros, pues a través de este proceso, se busca no solo resolver esas disputas, sino también transformar las relaciones.

Más aún en el ámbito educativo, donde su aplicación para prevenir la violencia resulta de vital importancia, pues se trata de una herramienta para que las alumnas, alumnos y personal docente resuelvan sus conflictos y previene la probabilidad de que en la escuela se desarrollen otros fenómenos como el acoso escolar u hostigamiento, problemáticas que en un futuro se convierten en delitos.

Insistió que el uso de Mecanismos Alternativos de Solución de Conflictos a través de la mediación, además de disminuir drásticamente los costos de un juicio legal, civil o mercantil, permite generar una cultura de paz, pues al impulsar un arreglo entre las partes, regularmente la relación entre vecinos o familiares suele recomponerse a diferencia de cuando la solución se da a través de la sentencia de un juez.

La Ombudsperson consideró aún más importante que, si la mediación se implementa desde el ámbito educativo, además de obtener los beneficios para dirimir sus diferencias, permitirá sembrar entre las y los estudiantes, una nueva forma para la resolución de sus propios problemas y se fortalecerá la cultura de paz.