PLAZA TLAXCALA

ZACATELCO, UN GOBIERNO FALLIDO

Lourdes Romero
Inicio mi comentario de esta semana lamentando los hechos de violencia ocurridos la noche de este lunes 8 de abril en el Municipio de Zacatelco, al igual que la insensibilidad de figuras políticas que pretenden lucrar electoralmente con los sucesos críticos que acontecieron en la colonia Xitototla, donde un civil y un policía perdieron la vida.
Sé que estamos en tiempos de campañas, en momentos en los que, ante los problemas sociales, resulta más sencillo criticar y cuestionar, incluso mentir, antes que proponer y solucionar. Sin embargo, la sociedad merece conocer los hechos en su justa dimensión, no manipulados por conveniencia políticas.
Personas como la candidata a Senadora por el PRI, Anabell Ávalos Zempoalteca, olvidan que ya fueron autoridad municipal, y que no son ejemplo de buenos resultados. Pero ahora, desde la ignorancia y el rencor, llaman a la unidad para “recuperar” la paz que, precisamente, se fue deteriorando poco a poco bajo el régimen autoritario y corrupto en que se formaron.
En primer lugar, debemos recordar que la ley es muy clara al señalar que una de las funciones de los gobiernos municipales es la de seguridad pública, y que su ejercicio es una obligación de los ayuntamientos. Por eso, a los presidentes municipales corresponde la responsabilidad de organizar y ejecutar las funciones seguridad, vialidad y asistencia a la población en situaciones de emergencia en este ámbito de gobierno.
No obstante, en Zacatelco, el alcalde Hildeberto Pérez Álvarez, señalado en diciembre de 2023 por permitir que presuntos colombianos usurparan funciones policiales, fracasó rotundamente en esta y otras obligaciones, lo que ha lastimado gravemente la tranquilidad y el desarrollo de las y los zacatelquenses.
Tienen razón aquellos legisladores locales que, este martes, condenaron en tribuna el gobierno fallido del presidente municipal. Y están en su derecho de solicitar la desaparición del actual Ayuntamiento, y la separación del cargo del alcalde, quien, desde hace tiempo, dejó de asistir a las mesas de seguridad. Empero, hubiese sido deseable que se detuvieran a revisar la nueva Ley de Seguridad Pública antes de asegurar que el Consejo Estatal de Seguridad dilató la decisión de declarar el mando coordinado en Zacatelco.
La realidad es que este cuerpo colegiado ya había iniciado el procedimiento respectivo, con base en las disposiciones de la norma, y que esta misma semana se hubiera oficializado. Desafortunadamente, los eventos del pasado lunes obligaron a que se anticipara. Además, no hay que olvidar que la figura del mando coordinado es nueva, y que se creó por iniciativa de la Gobernadora del Estado, quien impulsó la creación y vigencia de la actual Ley de Seguridad Pública y Ciudadana, justamente, porque la situación de la seguridad en algunos municipios exige en casos, como el de Zacatelco, que el gobierno estatal intervenga para asumir el control de la seguridad ante la incapacidad de las autoridades locales.
La reunión extraordinaria que el Consejo Estatal de Seguridad llevó a cabo los primeros minutos de este 9 de abril demuestra que el orden social y la gobernabilidad son prioridades para el gobierno estatal, y que se atienden con base en la ley y los procedimientos que ésta establece.
Señoras y señoras candidatos, políticas y políticos de Tlaxcala, por favor, absténganse de sacar raja política a las coyunturas, de llevar agua a su molino manipulando los problemas de la gente. Si no son capaces de darles solución, por lo menos no los saquen de contexto.

Noticias

Síguenos en redes