Redacción
Anoche, representantes de Morena, líderes y legisladores de oposición se confrontaron por los resultados de la consulta popular, pues mientras el líder de la guinda, Mario Delgado, acusó al Instituto Nacional Electoral (INE) de no estar a la altura del país, PRI, PAN y PRD consideraron el ejercicio como un fracaso, un gasto innecesario y una simulación.
Delgado aseguró que la autoridad electoral obstaculizó la jornada al instalar sólo un tercio de las mesas receptoras que hubo en los comicios del 6 de junio, además de que no colocó casillas especiales: “El INE nos informó que no iba a instalar el número de casillas que hubo en la elección pasada. Sólo tenemos un tercio y además no hay especiales.
“Nuestro Presidente está trabajando en Nayarit, en una votación normal podría votar en una casilla especial, pero no podrá ejercer este derecho hoy”, dijo.
“El INE es una autoridad electoral que viene del antiguo régimen, que obedece a los partidos que lo pusieron, son empleados de la derecha, de los conservadores, de la mafia de la corrupción”, arremetió el morenista.
En tanto, dirigentes y legisladores de PAN y PRD coincidieron en que la consulta fue sólo un acto de simulación de un supuesto combate a la corrupción por parte del gobierno de la 4T, un gasto millonario en medio de la pandemia y un rotundo fracaso.
El presidente del PRI, Alejandro Moreno, dijo que “el fracaso de la consulta popular demostró una vez más que los mexicanos están hartos de un gobierno que se esconde en el pasado”.
En un mensaje en redes sociales, advirtió que “con este juego propagandista se desperdiciaron más de 500 millones de pesos, dinero que no le sobra ni a las finanzas nacionales ni a los bolsillos de los mexicanos”.
Julen Rementería, líder del PAN en el Senado, mencionó que “la consulta costó 500 millones de pesos y fue un rotundo fracaso (…) Lleva un claro mensaje de los mexicanos hacia el Presidente: póngase a trabajar y deje el circo y las simulaciones”.
Por su parte, Diego Fernández de Cevallos, excandidato presidencial y exsenador del PAN, coincidió en que la consulta fue “una perversión política del más alto nivel (…) Es ilegal, antidemocrática y algo idiota”.
El líder del PRD, Jesús Zambrano, aseguró: “Es una farsa que llevó al país a gastar más de 500 millones de pesos”.
Zambrano Grijalva también acusó al presidente Andrés Manuel López Obrador de ser un demagogo, pues, aseguró el peredista, la encuesta no tenía una pregunta clara.
“Se le cuestionaba a la gente si se aplicaba o no la ley, pero la ley se debe aplicar, y si tienen elementos para llevar a juicio a expresidentes, que los presenten.
“Si no los tienen son unos demagogos que estuvieron engañando a la gente. Además, si los tienen y no los presentan son unos cobardes o cómplices”, expresó el coordinador del sol azteca.
