Alondra Cazares

De acuerdo al parte de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC), al concluir la revisión de las terrazas y azoteas de las casas que en años anteriores se rentaban para que los visitantes disfrutaran de la tradicional Huamantlada vista desde lo alto, se dictaminó que son 30 viviendas las que no dan seguridad de soportar a un número mayor de espectadores.

El presidente municipal, Jorge Sánchez Jasso, señaló que Protección Civil ha decido darle importancia al tema de las azoteas ya que, en algunas viviendas del municipio, la humedad y los daños en su infraestructura provocados por el pasar de los años representan un riego para los asistentes, ya que el peso de la gente puede provocar que algunos techos colapsen.

Asimismo, CEPC emitió otra recomendación con respecto a los burladeros, que son las barreras que dividen a los asistentes de un ataque inmediato de los toros, ya que, en otras acciones, con el fin de que más personas quepan, el espacio asignado para estos burladeros invade más de lo permitido, poniendo en riesgo a los asistentes, por lo que este año no se vigilara la instalación de la infraestructura para la Huamantlada.

Por otra parte, Sánchez Jasso expuso que la venta de bebidas alcohólicas sin regular, representa un problema, ya que pone en riesgo toda la logística del evento, por lo que exhortó a la ciudadanía evitar ingerir estas sustancias que pone en riesgo su integridad.