Rogelio Sánchez
Cientos de comerciantes informales se han instalado en las calles céntricas y cercanas al mercado Hidalgo en Apizaco, con permiso del ayuntamiento que dirige Pablo Badillo Sánchez, lo cual ha afectado a comerciantes formales afectando no sólo la imagen de la ciudad rielera, sino también poniendo en riesgo el tránsito peatonal.
Y es que los vendedores de temporada ocupan banquetas provocando caos a los transeúntes quienes deben arriesgarse a caminar por la vía vehicula y la conglomeración de personas no permite mantener la Sana Distancia, teniendo en cuenta que Apizaco ocupa el tercer lugar en contagios acumulados por Covid-19.
Y es que, al parecer, los 257 mil 500 millones de pesos en ingresos por uso de vía y lugares públicos, según la Ley de Ingresos recientemente aprobada, y del cual los comerciantes aportaron derivado del 10 por ciento de un día de salario por metro cuadrado, no bastó para el alcalde, así como tampo fue suficiente la recaudación de los parquímetros instalados en el primer cuadro de la ciudad.
La instalación del comercio informal, varios de ellos que no pertenecen al municipio, ha provocado la oposición de quienes pagan permisos y se mantienen al día con las cuotas que el ayuntamiento exige, así como prevén una importante baja en sus ventas derivado de la informalidad promovida por Pablo Badillo.
