Rogelio Sánchez

Pese a ser consciente de la cantidad de quejas que existen en contra de chóferes del transporte público, el alcalde de Apizaco, Pablo Badillo Sánchez, hará caso omiso de las manifestaciones ciudadanas, ya que tanto el gobierno municipal como los empresarios transportistas ya formalizaron acuerdos entre sí.

Si bien, como mencionó Badillo Sánchez durante la reunión, muchas familias dependen de dicha actividad económica, en la demarcación existen diversas quejas por la operatividad del transporte público.

Exceso de velocidad, acaparamiento de carriles en calles y avenidas, accidentes viales, exceso de usuarios en plena pandemia por Covid-19, entre otras reacciones son las que han generado los transportistas en el municipio rielero donde los ciudadanos han exigido se interpongan sanciones contra los transportistas sin que hasta la fecha las autoridades hayan actuado en consecuencia.

Más de 20 rutas de transporte sostuvieron diálogo con el alcalde quien cobijará sus peticiones además negó compromisos y contratos con empresas de grúas, ni cobro por derecho de piso a unidades y conductores.

El alcalde panista únicamente solicitó a los concesionarios respetar las señales de tránsito y a manejar con precaución, sin aclarar que las autoridades municipales continuarán realizando su labor en casos de siniestro, y violaciones a las leyes de tránsito.